En los tiempos actuales existen enormes reducciones con respecto a las barreras de la competencia global en la industria bancaria. Nuevos modelos de negocio son implementados gracias a las telecomunicaciones y otras tecnologías financieras.
Banca
y transformación digital
De las empresas Fintech
encuestadas por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), 41% se enfocan a atender clientes que permanecen excluidos o subatendidos por el sector tradicional, ya sean individuos o pymes.
Según el estudio de CEO Outlook de la firma consultora KPMG, 95% de los ejecutivos de entidades de servicios financieros opina que la disrupción tecnológica es sinónimo de oportunidad.
Ahora las instituciones no bancarias surgen como nuevos competidores de los bancos tradicionales, los cuales además pagan un alto costo por mantener sus sistemas habituales.
De acuerdo al primer informe trimestral 2019 de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), se observa una tendencia similar a la de 2018. Sigue el crédito creciendo moderadamente, el desapalancamiento financiero avanza lentamente, y los niveles de patrimonio se conservan muy por arriba de los requisitos financieros.
No obstante, nadie sabe aún con certeza cómo se reemplazará el modelo de negocio actual, el cual ha permanecido relativamente sin oposición desde que comenzó la llamada banca comercial moderna.
¿Cómo implementar una efectiva innovación financiera
?
Los bancos bien podrían aprender diferentes lecciones que otros modelos de negocio desarrollan. Ahí están las grandes corporaciones que basan su actividad en las nuevas tecnologías y que logran elevadas cifras de ganancias, con una impresionante base de clientes que, de proponérselo, bien podrían representar una seria amenaza para los bancos y las instituciones financieras.
Banca Digital
como plataforma
Al compartir el acceso a sus propias interfaces de programación de aplicaciones (API por sus siglas en inglés) y de tecnología financiera a terceros, los bancos pueden abrir vías totalmente nuevas para generar ingresos, acelerar la innovación y ofrecer nuevos servicios que los clientes buscan.
En el año 2000, eBay lanzó su innovadora API REST. Al paso de los años se han ido uniendo otras plataformas como Amazon y Google en la búsqueda de sus nuevos objetivos, y finalmente, con los smartphone se confirman las APIs como la llave del futuro.
Sin duda la banca como plataforma será un diferenciador competitivo clave en el futuro de los servicios financieros, particularmente en un momento en que los bancos se enfrentan a rendimientos decrecientes de su cartera existente.
Las tasas de interés históricamente bajas y la compresión de los márgenes en todos los ámbitos están afectando la rentabilidad. Si no se exploran nuevas asociaciones y fuentes de ingresos será más difícil competir contra los titanes de la tecnología, que podrían eventualmente subvencionar los servicios bancarios en caso de que decidieran ofrecerlos, una realidad no tan lejana.
El enfoque que deben adoptar los bancos es, por ejemplo, detectar oportunidades para ofrecer planes de retiro cuando los clientes abren una cuenta. El uso de las API será clave para el éxito. Existe un creciente reconocimiento de que un enfoque de Banco como plataforma, desempeñará un papel importante en la industria.
La Banca como servicio, un proceso ágil
El uso eficiente de una estructura de banca de servicios proporciona una propuesta de valor de extremo a extremo, que libera al proveedor de tener que desarrollar todos los servicios periféricos necesarios, incluida la autenticación y otros servicios de seguridad.
Aquellos que adoptan el modelo de banca como servicio pueden proporcionar un nivel de confianza más alto del que podría ofrecer un proveedor más pequeño. Se trata de un proceso que garantiza la ejecución general de un servicio financiero a través de la web.
Hoy en día, la línea entre los entornos de pago presencial y remoto se ha disuelto, tanto en algunos mercados que prácticamente ya no existe. La era de las terminales de transacciones de un solo propósito está llegando a su fin. El software convierte cualquier localidad y cualquier dispositivo en un punto de venta.
Una transacción ahora puede realizarse en cualquier lugar, puede ser físico o digital. El punto de venta puede ahora hacer algo más que procesar transacciones.
Los minoristas de todo el mundo exigen ahora más de sus sistemas punto de venta (POS por sus siglas en inglés), más allá de las capacidades de pago de un solo propósito.
El nuevo punto de venta es ahora una plataforma de lanzamiento para ofertas que puede construir relaciones y recompensar la lealtad del cliente; ahí es donde se encuentran las oportunidades. Aun cuando la tendencia a la digitalización ha avanzado enormemente, todavía existen huecos enormes que la banca en su posición tradicional y conservadora no ha atendido. Conforme las grandes empresas no financieras prestan a sus clientes una atención dedicada y proveen servicios complementarios, la banca lo hace muy lentamente.
Gestión de cartera, pagos en tiempo real, transacciones sin fronteras, y más, están ahí al alcance de una institución que requiere instrumentar nuevos modelos de negocio para innovar y continuar siendo relevante para sus clientes.